Aquí está
la Tierra Pura.
La Tierra Pura está aquí.
Sonrío con atención plena
y habito en el momento presente.
Buda es la hoja otoñal,
el dharma es la nube del cielo,
la sangha está en todas partes;
mi verdadero hogar está aquí.
Inspiro y las flores se abren.
Espiro y el bambú se balancea.
Mi mente es libre.
Disfruto todo momento.
Ahora mismo podemos estar en contacto con las Tres Joyas.
Buda, el dharma y la sangha están en nuestro interior y en todo cuanto nos rodea,
en las hojas de los árboles y en las nubes.
La sangha no son un pequeño grupo de personas que piensan igual que tú
(los miembros selectivos de tu club personal),
son todos los seres humanos
y también todos los árboles, los pájaros, los arroyos.
Nuestro auténtico hogar es el momento presente, el aquí y el ahora.
No necesitamos ir a otro lado en busca de la felicidad.
Éste es el auténtico refugio.
Si en el momento presente no podemos estar en contacto con la Tierra Pura,
no hay esperanzas de que en el futuro haya una Tierra Pura.
En cambio, si podemos estar en contacto con ella en el momento presente, no cabe la menor duda de que habrá una Tierra Pura en el futuro.
Todas las maravillas con las que entramos en contacto cuando regresamos al momento presente
pertenecen a la Tierra Pura.
Nuestro propio cuerpo pertenece a ella,
es algo igual de maravilloso y milagroso que esa tierra.
Es lo mismo.
La Tierra Pura no es algo externo a nuestro cuerpo y a nuestra mente.
Qué utilizamos y cómo
para caminar por la Tierra Pura?
La atención plena,
porque la atención plena
disipa el olvido.
disipa el olvido.
Disipa el caos y hace emerger la sabiduría y la comprensión.
La comprensión y la sabiduría nos permiten tener una visión profunda
y saber que en el instante presente estamos viviendo un momento maravilloso,
en la Tierra Pura que hay en nuestro interior
y a nuestro alrededor.
Podemos contemplar este ghata (este poema, esta oración con la que comenzábamos)
en meditación, sentad@s o al caminar, o mientras comemos.
No buscamos una tierra pura ni la felicidad en ningún otro lado.
Tenemos la oportunidad de caminar, o sentarnos a meditar o a comer
con atención plena. Inmers@s en el dharma, con Buda y la sangha original.
No están en el pasado, están aquí presentes, en este preciso instante.
No hay ni un sólo momento en que no podamos estar con Buda, el dharma y la sangha.
(TNH).
Me gusta lo que publicas, y soy consciente de ser sangha, todos somos pero unos lo sabemos y otros no tienen ni idea de lo que hablamos. Gracias por tus enseñanzas, un abrazo
ResponderEliminarDa igual cómo le llamemos o cómo le llamen, no, Ana?
ResponderEliminarSangha, hermana, hermano, colega, amig@, compañer@ en esta experiencia (humana o no). Lo importante es que lo sintamos, que somos parte de un mismo cuerpo.
Como olas del mismo mar o hierba (árboles, arbustos) de la misma tierra.
Lo importante es que tú lo sientas, y yo. Que sintamos la alegría de compartir el mismo viaje, de ser la misma cosa.
Y los demás lo notarán -desde la pareja, la amiga o enemig@ hasta tu gato o las plantas que cuidas o te encuentras por el camino.
Gracias por tu feedback.
Y por "darte cuenta".
:)