sábado, 4 de mayo de 2013

La sangha no son sólo los miembros de tu club.










Querida amiga:

Qué importante es el refugio en la práctica budista.
El refugio último,
en las 3 joyas.
Las Tres Joyas,
con mayúsculas de sagrado (no ordinario, especial).
El refugio último en Buda, el Dharma y la Sangha.

Leo en un libro "los tres reconocimientos" básicos para el refugio budista, el Refugio:

"Al refugiarnos en la Joya del Buda, debemos considerar todas las imágenes de Buda como verdaderos Budas, sin tener en cuenta el material del que estén hechas o si son nuevas o viejas.
Al refugiarnos en el Dharma, nos comprometemos a considerar todas las escrituras budistas como la verdadera palabra de Buda. Por lo tanto, no debemos maltratarlas, ponerlas en el suelo o pisarlas. (Los libros son sagrados y deben usarse como objetos sagrados, y no se debe poner encima de ellos objetos como bolígrafos, gafas, etc.).
Por último, al refugiarnos en la Sangha, debemos considerar a los que visten los hábitos de ordenación monástica como si fueran la verdadera Joya de la Sangha".

A menudo, en las clases (aquí y allá, no importa las tradiciones), se repite una y otra vez lo "afortunad@s" que somos por haber tenido acceso a estas instrucciones, porque hayan aparecido en nuestra vida -cuando no ha ocurrido así para la mayoría de la gente. Lo privilegiad@s que somos.
En casi todas las tradiciones (budistas y no budistas) se pone un énfasis especial en la suerte de contar con una Sangha (Feligreses o llámales como quieras), los amigos y amigas espirituales, con quienes nos une un vínculo especial -que, por otra parte, no nos une con el resto de la población, humana y no humana. Y en la práctica nos separa de ell@s.
De hecho, muchas veces, las personas externas a la Sangha pueden llegar a ser consideradas incluso "enemigas del Dharma". Por qué? Porque pueden ser una influencia peligrosa en nuestra práctica, llevarnos por el mal camino o hacernos dudar.
Muchas religiones, budistas y no budistas, coinciden en esta visión.

Y lo entiendo, amiga mía. Entiendo la importancia de contar con compañer@s (amig@s espirituales) con quienes compartir el camino y la práctica. De hecho, siempre lo hacemos así, en cualquier actividad mundana. Desde el principio. Cuando aspiras a ser periodista o médica o carpintero o futbolista o bailarín, tiendes a formarte, a buscar las mejores instrucciones (el dharma), referentes sublimes, modelos a seguir (budas) y compañer@s con quienes estudiar, compartir y crecer (la sangha). Para llegar a sacar, así, al periodista, médico, carpintera, futbolista o bailarina que llevas dentro.
Y está bien, es una herramienta como otra cualquiera. Una herramienta necesaria. O tres.

Pero, querida amiga, las actividades mundanas son una cosa y el camino espiritual es otra, aunque compartan ciertas estrategias. Y creo que tendríamos que poner mucha atención para no utilizar las estrategias espirituales (el método) como una forma de segregación más, de separación, que nos sectarice.

Thich Nhat Hanh es un maestro budista y dice: "Si vemos a Buda como algo sólido, externo a nosotros, es mejor que no tengamos ningún Buda. Si vemos el dharma de este modo, es mejor no tener ningún dharma". La sangha no son sólo los miembros de tu club, viene a decir, no son sólo las personas que comparten creencias, opiniones, puntos de vista, teorías o aficiones. La sangha son todos los seres humanos, porque todos los seres humanos son compañeros de viaje en esta experiencia humana. Y a la vez son tu campo de práctica, el objeto necesario para desarrollar amor y compasión y bodichita. Y dice más: "la sangha no son sólo los seres humanos, son también todos los animales y los árboles y los arroyos..."
¿Este maestro budista no es budista, por decir eso? ¿O por el contrario, transmite un budismo profundo y auténtico?
¿Está Buda más presente en las estatuas que adornan los templos y altares o en el ser humano que tienes delante? Búscale con sabiduría (como una contemplación y una meditación más): ¿está en la piedra o en el polvo de oro que le cubre, tal vez en la pintura de colores? ¿Está Buda más ahí fuera que dentro de ti?

Desde este punto de vista, Buda no se ha quedado a vivir recluido en los materiales de las estatuas o en las postales, ni la sangha se viste con hábitos especiales. Quizás los budas y la sangha aparecen como tengan que aparecer para que tú descubras lo que tienes que descubrir.

Cuando tuve que salir de viaje y separarme de mi familia espiritual, muchas de estas personas se preocupaban por mí: qué sola vas a sentirte, con quién vas a hablar y estudiar y practicar a partir de ahora? El mensaje implícito era: ahí fuera el mundo está lleno de ignorancia y de perturbaciones mentales, cómo vas a poder mantener tus logros (el amor, la compasión, la bodichita, la sabiduría de la vacuidad, por minúsculas que sean estas experiencias alcanzadas) en un entorno tan hostil? Cómo vas a evitar que degeneren y vuelvas a la confusión y a la pesadilla de los infiernos, ahora y en las innumerables vidas futuras?
Y sabes qué, amiga mía? Que encontré a la sangha en todas partes, en el vestuario del gimnasio, en la cola del súper, en la puerta de la escuela, porque todo el mundo padece conflictos y sufrimientos y quiere resolverlos y quiere ser más feliz y evitar el sufrimiento y buscan herramientas para lograrlo. Todas las personas, sin excepción. En todas ellas he encontrado a compañeras en el camino, de teoría y de práctica. Todas ellas hablan del dharma (de la comprensión de la mente y de cómo usarla para ser más feliz y hacer más felices a los demás), a su manera, con unas palabras u otras pero todas buscan lo mismo e investigan en lo mismo, y todas son la sangha y son guías espirituales y emanaciones de budas que me ofrecen la oportunidad de encontrar la sabiduría en mi corazón. O en mi mente. O en mi continuo mental, llámalo como quieras.
Dicen que Jesús dijo: "Nada de lo humano me es ajeno". Creo que el buda histórico estaría de acuerdo. Y ninguno de los dos se pelearía por los derechos de autor.

No te alejes de tu familia para encontrar a Dios, o a Buda.
¿Es que no puedes ver a Buda en tu familia?
No tienes que abandonar a tus hij@s, como Abraham estuvo dispuesto a sacrificar a su hijo Isaac para contentar a Dios. ¿No recuerdas que era una simple broma divina de mal gusto?
Qué Buda querría que sacrificaras a tu hijo o le abandonaras?
A los seres con los que te une una relación kármica especial, una responsabilidad ineludible.
A tu pareja, amigas y amigos de la infancia o en el camino, a tu madre y a tu padre.
"No traspases tus propias cargas a otros", ¿no es éste uno de los 18 compromisos del adiestramiento de la mente?
Qué Buda querría que les abandones, que les menosprecies, que dejes de comprenderles y de acompañarles en su aventura humana?
¿Es que acaso el amor a todos los seres sintientes les excluye a ell@s?

Buda, el dharma y la sangha están en todas partes.
Y que nadie los use para segregarme, para separarme de ti o del resto de los seres, objetos y situaciones de este escenario que se despliega ante mí.
Y esto incluye a las personas con las que me une una relación kármica (de compromiso) especial.

Que mi idea de las tres joyas no me segrege, que no me separe, que no me sectarice.

Buda, el dharma y la sangha no necesitan letras mayúsculas para ser grandes y quizás se encuentran mejor en las minúsculas y en lo cotidiano.
Porque lo sagrado no puede estar fuera de lo cotidiano y no necesita mayúsculas ni adornos finos y carísimos para aparentar.
Y la única ofrenda que tiene sentido es la propia práctica:
el amor, la solidaridad (o la compasión), la empatía, la conexión (igualarnos), la ligereza, soltar (la vacuidad)...
Y, quizás, las designaciones, el mero nombre es lo de menos.
Y que no nos sirva para segregarnos, para separarnos, para sectarizarnos.


Fdº:  tu (irreverente) amiga espiritual.





17 comentarios:

  1. Hola, Marié.

    Si hemos de hablar con propiedad, la Joya de la Sangha es la Joya de la Comunidad Espiritual. ¿Quiénes forman parte de esta Comunidad? Sólamente los seres Superiores, que han realizado la vacuidad directamente. Pero, para ayudarnos en nuestra práctica, podemos considerar Joyas de la Sangha, primero, a todos aquellos que mantengan moralidad pura, y después, a todos aquellos que beneficien a los demás y muestren un buen ejemplo a seguir. Hasta aquí.

    Dices: 'la sangha no son sólo los miembros de tu club'. De acuerdo. Pero si hemos de pensar con propiedad, es decir, si hemos de ser precisos y exactos en nuestro pensamiento, veremos que la Sangha 'no son los miembros de cualquier club', y mucho menos 'todos los miembros de todos los clubes'. Y habremos de admitir que la Sangha es en realidad un Club Muy Selecto. Un Club Muy Selecto al que, no obstante, todos podemos entrar, y del que todos podemos ser miembros. ¿Cómo y de qué manera? Geshe Kelsang dice que si queremos convertirnos en una Joya de la Sangha, todo lo que necesitamos hacer es subyugar nuestras mentes incontroladas con la práctica del Dharma; dice que si estamos siempre con una mente pacífica y apacible nos convertiremos en un buen ejemplo para los demás.

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  2. La vida está llena de "ejemplos" para los demás, Jaume.
    A veces se apellidan kadampa y a veces no -se autodesignan de otra manera, qué más da.
    A veces se autodesignan budistas y a veces no.
    La vida está llena de "ejemplos" para mí.
    Deseo de corazón que para ti también, Jaume.
    Que puedas ver cuántos seres (que todos los seres) están ahí, beneficiando a los demás.
    Nos parezca o no que mantienen una "moralidad pura".
    Que sepamos ver.

    abrazo fuerte, Jaume.


    ;)

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  3. Me ha encantado el post Marié, coincido totalmente..reconozco que el amor que he sentido alguna vez en la cola del supermercado me ha calado mas que el té compartido con mi amiga espiritual. Me ha recordado a San Francisco en una carta a un ministro de su orden al cual deniega el permiso para retirarse a una cueva alegando las razones que en el post explicas. Esto, San Francisco, lo comprendió después de haber errado el mismo buscando ese sosiego de los "iguales". Un beso y feliz domingo.

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  4. Qué bonito (qué regocijo) es sentir que las personas ven lo "sagrado" a su alrededor; en su familia, en el mercado, entre las madres y padres a la salida de la escuela, entre las criaturas (en los mismos contratiempos que resuelven); en los animales que se dejan acariciar y en los que no; en el sol que te calienta, en la brisa que te refresca...
    Hay maestr@s que no se cansan de repetir que la Tierra Pura está aquí, los budas y la sangha de los seres superiores. Un día nos sorprenderemos.
    Pero, de momento, es un gran regocijo sentir que ya lo estamos vislumbrando.

    Qué regalo, tus palabras, Sonia. Gracias.

    y abrazo.

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  5. Hola, Marié.

    Que tengas mejor vista que yo, no es extraño. Es fácil. Pero, ¿cómo podremos admitir que tu visión sea más elevada que la de los Maestros Espirituales de la humanidad, que han considerado a todos los seres vivos necesitados de Refugio, y no las fuentes de Refugio que, según tu visión, dices que son?

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  6. Jjajajaja... Yo también voy perdiendo vista con la edad, Jaume -o quizás es que la dejamos ir para no entretenernos demasiado con los detalles. :)

    Sabes que creo, Jaume? Que hay much@s Maestr@s Espirituales de la humanidad, de visión muy elevada, que saben adaptar las enseñanzas a sus discípul@s, como dicen que hizo el Buda histórico. Y eso no significa que sus enseñanzas se contradigan -como las diferentes medicinas no se contradicen entre sí, simplemente tienen efectos diferentes para diferentes situaciones.

    Todos los seres vivos están necesitados de refugio -mientras lo sientan así y se sientan perdidos o bajo la (ilusión de la) amenaza de fuertes tormentas externas.
    Y al mismo tiempo son fuentes de refugio -si les ves como emanaciones de Buda, si ves el Buda que cada ser lleva dentro.
    O aunque sólo le veas como el compañero que hará posible que alcances la iluminación. Porque sin seres con los que practicar (amor, compasión, bodichita, vacuidad) no hay forma de Despertar.

    Sólo por eso ya son una fuente de refugio y de postración.

    Cuando empecé a practicar artes marciales, me fascinaba que no sólo saludábamos (nos postrábamos ligeramente) al maestro al encontrarnos con él, sino también a cada compañero y compañera, antes de empezar a practicar en parejas un ejercicio (como señal de respeto, por lo que íbamos a aprender en la práctica) y al acabarlo (como agradecimiento, por lo aprendido).
    Y también saludábamos al dojo (la sala donde se aprende) antes de entrar. Y al salir.

    Me gustaba ese ejercicio de presencia y gratitud al maestro, el compañero o compañera, el dojo -el escenario donde se aprende, que podía ser la sala oficial, la playa, la montaña, el parque...

    Y aún me postro ante cada persona (o animal, objeto...) con la que aprendo, ante cada situación que me da la oportunidad de despertar un poco más.
    Porque sé que son emanaciones de Buda, oportunidades sagradas, llámales como quieras.

    un abrazo fuerte, Jaume.

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  7. Hola, Marié.

    Todos los seres son objetos apropiados de amor, compasión y gratitud, pero no son objetos apropiados de Refugio. Son cosas distintas. No son objetos apropiados de Refugio porque no se les puede seguir si se quiere evitar el sufrimiento. En amor, respeto y gratitud puedes postrarte ante ellos --y ante mí, ya que formo parte de ellos--, pero no nos puedes seguir, porque si nos sigues acabarás en un precipicio, lo más seguro.

    Ahora, si tú de todas maneras quieres seguirnos, hay libertad.

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  8. :)

    Abrazo fuerte, Jaume.

    Te sigo.
    (Ya sabes a quién)

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  9. Hay un libro de Jack Kornfield que estoy leyendo ahora que ahonda en este tema. Se llama "Después del extasis, la colada". Hacía tiempo que no compraba ningún libro "espiritual" pero el prólogo me conmovió y la verdad que lo estoy disfrutando. Un abrazo.

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  10. Yo también disfruté mucho la lectura de ese libro, Sonia.
    Ver:
    http://reflexionesdeunaestudiantebudista.blogspot.com.es/search?q=despu%C3%A9s+del+%C3%A9xtasis


    buen finde.

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  11. ja, ja..me parece a mi que fue a raíz de leer este post hace tiempo que me dio por investigar el título..hay que ver! por cierto, no habrás escrito por ahí algo relacionado con sexualidad y espiritualidad? es uno de los temas que actualmente trabajo y no encuentro gran cosa relacionada aparte del tantra? esa pulsión natural al contacto ( amor, sexo o ambos) combinada con el gran placer de la propia compañía.

    Buen finde también para ti!

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    1. Pues no sabía que llevabas tanto tiempo por aquí.
      Entonces, quizás te has encontrado con éste:
      http://reflexionesdeunaestudiantebudista.blogspot.com.es/2012/04/el-abrazo.html

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  12. Creo que tengo varios, compañera. Algunos en este blog (muy muy de refilón) y otras confidencias en mis cartas personales o en mis libretas a mano, en el cajón.
    Puede que comparta algunas contigo :)

    Pero puedo decirte (copio y pego) que, a mi modo de ver,
    Un amante no es nada en sí mismo, es una herramienta, el método que te abre las puertas de Keajra, ese plano más allá de la materia, un escalón más. Ese escalón.

    Él había pasado cuatro noches fuera, así que a su regreso celebraron.
    35 años y aún estamos haciendo esto, dijo ella.
    Él la miró como si 35 eones aún no fueran suficientes.

    Personalmente, creo que el sexo puede ser una excelente forma de meditación,
    en la muerte, el amor y la vacuidad.
    Todo en uno. Todo lo mismo.

    También puede ser un juego divertido a secas, y también está bien.

    Pero como práctica espiritual, ya que me preguntas, aparte de lo dicho más arriba, yo creo que el sexo puede ser una profunda meditación en el desapego, la renuncia, soltar y morir.

    El sexo como práctica de meditación en el desapego, la renuncia, la muerte, el amor y la vacuidad.
    Todo en uno.

    abrazo y a practicar, compañera. :)
    Si quieres -no es obligado ni indispensable.
    Una mera herramienta más.
    Con sus trampas y riesgos, como todas las demás.

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  13. Para una mujer que siempre ha confundido ser deseada con ser amada, es una gran trampa y un gran riesgo. Mi faceta seductora está inhabilitada, no se si definitivamente...pero en cambio a veces extraño esa danza de miradas y conquista..que no lleva a nada en realidad. Ahora me miro el post! y sino, siempre hay áreas que explorar de uno mismo con el auto-erotismo.

    GRACIAS

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  14. Amiga, creo que podemos comentarlo en privado. Pero, en principio, en mi experiencia, yo creo que el erotismo (auto, bi o en multitud, da igual) tiene poco que ver con la espiritualidad -aunque tengo una muy buena amiga, sexóloga, que solía hablar del "culto al erotismo", que yo he visto siempre más como una forma de transcendencia, no necesariamente espiritual.

    (Tengo que escribir una entrada sobre cómo las palabras, a veces, ya no nos valen, porque cuando la experiencia es nueva hay que inventar, o al menos utilizar, nuevas palabras).

    Lo que quiero decir es que yo veo la sexualidad más como meditación que como erotismo.

    Seguimos hablando...

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    1. La sexualidad/espiritual -de la que tú hablabas-, digo que la veo como una forma de meditación.
      Lo cual no quiere decir que no la puedas usar en ocasiones de otra manera, como la sex./juego-infantil-de-exploración, la sex./divertimento, la sex./erotismo, la sex./morbo... Yo qué sé, lo que sea. Mientras no le hagas daño a nadie y no acabemos "distrayéndonos" demasiado...

      Seguimos hablando.

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  15. GRACIAS. me pido una de "abrazo" ( o dos..ehem)

    MUACK

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