Encontré
en mi buzón
un email escueto:
"Sí, perfectamente".
Nos escribimos tantos que no vi claro a qué respondía,
así que busqué en la carpeta de enviados con ayuda del asunto.
Querida amiga:
Ya que me preguntas, sólo puedo decirte que lo mejor es
dejar de poner energía (pensamiento) en relaciones que hacen daño, no funcionan, que ni siquiera existen.
Lo malo del apego (por una persona o cosa) es que tiende a extenderse ocupando todo el espacio mental
y esa obsesión no te deja espacio para ver la belleza que hay fuera, en otras personas, cosas o situaciones.
Y todo lo demás parece que carece de interés.
Pero sólo es una distorsión producida por el apego obsesivo.
Lo malo del apego (la obsesión) por una persona o cosa
es que no te deja ver la belleza y el interés que encierra todo lo demás que te envuelve.
El apego es un ladrón y un mentiroso.
¿Me explico?
El problema es que entender no siempre cambia radicalmente las tendencias personales
y la experiencia de hipnosis
pero puede ser como un gota a gota que antes o después acaba
despertándote.
Y qué era aquello del apego bueno como el colesterol...
ResponderEliminarBueno, es esa simpatía, ese sentimiento de atracción hacia algo (ese apego), que, lejos de limitarte, te sirve como referente, como inspiración para hacerlo extensivo a todos los demás seres.
ResponderEliminar¿Me explico?
Más información en:
http://reflexionesdeunaestudiantebudista.blogspot.com.es/2011/12/sobre-el-apego-bueno-como-el-colesterol_01.html
muchas gracias por compartir, acabas de abrirme los ojos ante una situación que se había repetido mucho en mi vida y no conseguía controlar: mi aferramiento a las cosas y personas y como ocupa toda tu mente cegándote.
ResponderEliminarParece mentira como hay cosas que hasta que no las ves escritas no te das cuenta aunque las tengas en la punta de la nariz...
Gracias por compartir tú también.
ResponderEliminarSí, a veces se nos va gran parte de la vida repitiendo pautas.
Hasta que aprendemos.
un beso.
.