lunes, 17 de diciembre de 2012
Fiestas familiares: Ponte tu armadura de amor.
(Una de repaso).
Qué peligro tienen las fiestas familiares.
Anoche tuvimos
la cena de navidad
en el Centro Budista Mahakaruna de Barcelona
-cualquier excusa es buena para
reunirnos en torno a una mesa después de contemplar y meditar.
¿A ver si adivinas el tema de la conferencia?
"Cómo afrontar las fiestas familiares", o algo así.
Bueno, vale, no así exactamente. En realidad era:
"Una velada por la paz en el mundo.
Enseñanzas sobre el buen corazón para unas fiestas felices en cualquier circunstancia".
Pero ya nos entendemos: cómo mantener un buen corazón
en cualquier circunstancia.
Y es que las fiestas familiares (y en realidad cualquier tipo de fiestas, celebraciones, reuniones, familiares o no) dan pie a mucho despliegue de "importancia personal".
Mucho más las reuniones familiares extensivas, donde tienden a emerger todas las "heridas", complejos, competitividad, guerras personales solapadas, facturas y resentimientos que se arrastran desde la más tierna infancia.
Pues bien, cómo afrontar esta prueba de fuego en esta contienda
de egos?
Protégete con una buena armadura de amor.
Rabjor nos dio varias herramientas:
1. Para empezar,
pide ayuda
y protégete
con una buena armadura
de amor, de estima.
Y a quién pedir ayuda? A los budas, a los seres sagrados.
A Dios, al Universo. llámale como quieras.
Quién otro podría ayudarte a generar amor profundo "a prueba de bombas"?
2. Aprecia, aprecia y aprecia. Aprende a apreciar lo que tienes, las personas con las que cuentas, el acopio de amor y cuidados que te ha protegido desde que llegaste a este mundo y a quienes les debes tu supervivencia y tu vida. Y ahí les tienes, todavía.
3. Aprovecha la ocasión para meditar, con más intensidad que nunca, en la bondad de todos los seres. En cómo llegaste desnud@ y con las manos vacías a este mundo y todo lo que la vida te ha regalado y sigue regalándote -la comida con que te alimentas, la ropa con la que te vistes, la casa que habitas, las personas con las que practicar y crecer y caminar tu camino espiritual...
Y 4. Y si te pillas que ya estás empezando, otra vez, a poner la atención en las faltas de los demás, dale la vuelta a tu lente y reconoce las tuyas, porque ya sabes que es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio. Y recuerda que has decidido adiestrar tu mente y empezar a mejorar. Así que empecemos a poner la atención en las cualidades de los demás, que eso sí que nos sirve de inspiración y ayuda.
El secreto está en generar buen corazón, amor y gratitud. Y todo irá sobre ruedas.
¿Que se cae una vez más en la cháchara de hablar temas sin sentido? Sonríe, y ya.
Tú, ni caso. Sonríe, y ya.
Y, si es posible, deja que el dharma hable por tu boca cuando sea oportuno (y cuidado con no ser "plasta", avisa Rabjor).
Ámales, sonríe, y no hay mucho más que hacer.
Disfruta de tu aprecio por las personas que te rodean y de las condiciones con las que cuentas (de tu preciosa existencia humana), y de tu gratitud.
Practica el dharma de estimar a los demás y todo irá sobre ruedas.
"Amor Victorious",
de Michelangelo Merisi
(Caravaggio).
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Muy bueno, que lastima me lo perdí!
ResponderEliminarGracias por compartir y comparto también en fcb.
Un abrazo!!! :)
A ti por compartir.
ResponderEliminar(Y por se la primera que se ha apuntado con éxito al taller de meditación de Chokga).
Nos vemos esta tarde.
abrazo.
Resulta dificil... en mi caso (supongo que le ocurre a muchisima gente) no me es tan dificil plantear estas estrategias en otras circustancias... pero realmente es un trabajo arduo y durisimo llevarlo a cabo en estas fiestas... creo que es la prueba de fuego.
ResponderEliminarEn otras circustancias es facil huir de este tipo de problemas (una estrategia que suelo llevar a cabo... luego creo que he logrado paz mental, pero solo lo he pospuesto o he huido de el), pero las obligaciones sociales... son exactamente eso: OBLIGACIONES... no se pueden posponer y se han de afrontar en el ahora y surgen casi-casi sin previo aviso esos momentos de conflicto... cuando todo parecia ir sobre ruedas y estabamos tan contentos
Magnifico planteamiento y una asignatura pendiente... no puedo decir nada mas...
Mucha suerte.
ResponderEliminarY ya sabes que hasta que no aprobamos las asignaturas no hacemos más que repetir...
Y, como decía un buen amigo: llega un punto en que hay que elegir entre el pequeño dolor del cambio o el gran dolor del dolor cronificado.
Llega un momento en que un@ se acaba cansando de repetir pautas "cansinas" -como decía otra buena amiga.
Suerte y p'alante.
Y que este año sea el año del cambio
significativo.
:)
Como he dicho antes: no puedo decir nada mas... pero te aseguro que leere con interes lo que escribas de ahora en adelante, me has encantado ^^
EliminarGracias